Si alguna vez tienes un encuentro con un agente del ICE, recuerda que tienes derechos, incluso si no eres ciudadano estadounidense. No te dejes intimidar por una posible deportación.
Cuando te enfrentas a una situación con un agente del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE), es importante que sepas qué decir y, sobre todo, qué no decir, ya que las palabras equivocadas pueden poner en riesgo tu estatus y aumentar las probabilidades de una deportación.
Aunque es fundamental respetar siempre la ley y ser cortés, también es vital estar informado sobre los derechos que tienes como inmigrante en Estados Unidos. Dicho esto, en la siguiente te damos algunos consejos sobre las cosas que nunca debes decirle a un agente del ICE para protegerte.
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Estados Unidos: Lo que nunca debes decirle a un agente de ICE
A continuación, te mencionamos algunas de las frases que nunca debes decirle a un agente de ICE porque podrían ponerte en peligro:
- “Sí, nací en otro país” o “no soy ciudadano”: Evita decir cualquier cosa que confirme tu estatus migratorio sin la presencia de un abogado. Aunque parezca una pregunta simple, admitir que no eres ciudadano puede ser suficiente para que inicien un proceso de deportación en tu contra. Guarda silencio y recuerda que tienes derecho a no incriminarte.
- “Sí, pueden entrar a mi casa” (sin una orden judicial válida): No abras la puerta ni dejes que entren agentes de ICE a tu hogar a menos que te muestren una orden firmada por un juez. Pídeles que la enseñen por la ventana o que la pasen por debajo de la puerta. Si no es válida, no estás obligado a dejarlos pasar. Proteger tu espacio es proteger tus derechos.
- “Está bien, responderé sus preguntas” (sin consultar a un abogado): No sientas que tienes que responder todo lo que te pregunten. Puedes quedarte callado. Tienes derecho a guardar silencio y a no revelar información sobre tu estatus, tu país de origen o tu historial migratorio. Contestar sin conocer tus derechos puede jugar en tu contra, incluso si tus intenciones son buenas.
- “No necesito un abogado”: Aunque creas que todo está claro o que no tienes nada que ocultar, no rechaces tu derecho a un abogado. Un abogado de inmigración puede ayudarte a entender tus opciones, protegerte de errores y acompañarte durante el proceso. No enfrentes esta situación solo.
- “Firmaré esto sin leerlo”: Nunca firmes un documento sin saber exactamente qué dice. A veces, un papel puede parecer inofensivo pero en realidad contiene una renuncia a tus derechos o una aceptación voluntaria de la deportación. Si te apuran, mantente firme y di que no firmarás nada hasta hablar con un abogado.
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