Dejarán de trabajar por 60 días mientras duren las investigaciones que determinarán si dejan de trabajar en el servicio público de forma permanente.
Como medida preventiva, la Municipalidad Provincial de Trujillo suspendió por 60 días al chofer y cobrador de la empresa Ícaro que pusieron en riesgo su vida y la de sus pasajeros al intentar arreglar el microbús en pleno movimiento.
Según la subgerente de Fiscalización, Julia Pretell Bermúdez, tanto Anatolio Villanueva Gutiérrez, chofer del vehículo de placa H1U -749; como el cobrador Miguel José Ibáñez Marquina, que tenía medio cuerpo metido en la capote; fueron suspendidos mientras se desarrollen las investigaciones que determinarán si estos sujetos dejan de prestar servicio en el transporte urbano.
Tenemos que prevenir que estas acciones temerarias se repitan. Pero lo más increíble en este hecho, es que los pasajeros no alzaron su voz de protesta para impedir que estos sujetos pongan en riesgo su vida”, señaló la funcionaria, tras recordar que la empresa Ícaro está involucrada en la muerte de dos niños por salirse de su ruta.
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