El abogado penalista Roberto Miranda explicó que la atención del psicólogo del Ministerio Público puede darse hasta dos meses después de ocurrido el hecho de violencia.
Las demoras en la atención de los exámenes psicológicos retrasan las investigaciones sobre denuncias de violencia familiar, según afirmó el abogado penalista Roberto Miranda.
Explicó que la atención del psicólogo del ministerio público puede dar hasta dos meses después de ocurrido el hecho de violencia.
“Las mujeres maltratadas deben esperar en promedio dos meses y medio para poder acceder a la consulta psicológica y a la pericia que va a determinar si existe o no una violencia psicológica”, explicó.
Agregó que en el caso de la violencia física, la pericia se realiza durante las 24 horas por el Ministerio Público. “Lamentablemente las demoras en estas gestiones provocan que los problemas con sus parejas se ahonde y se agrave”, advirtió.
En ese sentido, dijo que es muy importante llevar a cabo el Plan Nacional Contra la Violencia hacia la mujer que tiene el Ministerio de la Mujer, la misma que debe coordinar con el sector del Interior. “No hay coordinación con las comisarías. Falta más personal para acelerar este tipo de demandas y se tome las medidas cautelares respectivas”, expresó.
Explicó que el procedimiento para que una mujer presente una denuncia de agresión física empieza cuando las agredidas se dirigen a una comisaria donde existe una sección de familia atendida por un brigadier superior o un suboficial de tercera.
“Lamentablemente las mujeres se sienten menos cuando son atendidas por una persona de otro género”, anotó.
Indició que sería muy conveniente un convenio entre el Ministerio del Interior y las facultades de Psicología o Trabajo Social para que estas secciones sean manejadas por estos especialistas con el fin de no brindar un trato policiaco, sino un trato de comprensión para que las denunciantes tengan un ambiente de confianza y expresen el maltrato recibido.
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