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La educación sexual y la planificación familiar son la base para eliminar la violencia y desigualdad de género

El riesgo de muerte materna es 2,7 veces superior entre las mujeres y niñas sin educación.
El riesgo de muerte materna es 2,7 veces superior entre las mujeres y niñas sin educación. | Fuente: Shutterstock

Entre 2012 y 2017 el SIS atendió a más de 150 000 menores embarazadas de entre 9 y 17 años. La educación y salud en aspectos reproductivos son necesarios para cerrar brechas de género.  

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Entre 2012 y 2017 el Seguro Integral de Salud (SIS) atendió a más de 150 000 menores embarazadas de entre 9 y 17 años. Aunque los niños, niñas y adolescentes tienen derecho a una educación básica que comprenda la orientación sexual y la planificación familiar, las cifras de embarazo adolescente se han elevado hasta tratarse de un problema de salud pública.

De acuerdo con la Federación Internacional de Planificación Familiar, los servicios de salud y derechos sexuales y reproductivos son básicos para que las mujeres y las niñas tengan vidas saludables, así como para eliminar la violencia y las relaciones de poder en sus vidas.  Así, contribuyen a reducir la desigualdad de género.

La igualdad de género en el ámbito de derechos reproductivos debe tomar en cuenta la capacidad de las mujeres de tomar decisiones libres e informadas, así como la decisión de tener o no hijos y además en qué momento de su vida hacerlo.

Situación actual

La falta de educación y salud sexual es responsable de que muchas mujeres mueran cada día. Solo entre el 2014 y 2017, el promedio de muertes maternas en menores de 19 años constituyó el 13.8% del total, según datos del Ministerio de Salud.

Un punto importante es la pobreza, relacionada directamente con la falta de acceso a la educación y a la salud. Cifras oficiales de la ONU indican que en el mundo hay 4,4 millones más de mujeres que viven en la extrema pobreza en comparación con los hombres. Una realidad preocupante si tenemos en cuenta que el riesgo de muerte materna es 2,7 veces superior entre las mujeres y niñas sin educación.

Aunque más del 84% de mujeres peruanas entre 12 y 16 años va al colegio, no necesariamente aprenden sobre salud reproductiva. Un estudio de la Universidad Peruana Cayetano Heredia y el Instituto Guttmacher reveló que solo el 8% de docentes está apto para enseñar educación sexual integral.

Por esta razón, el mismo estudio arrojó que el 85% de escolares aprende sobre sexualidad por medio de Internet, un riesgo enorme teniendo en cuenta que el contenido en este medio no tiene filtro y se confunde con información de todo tipo, no necesariamente verificada.

¿Por qué es importante la planificación familiar?

La OMS indica que la planificación familiar ayuda a disminuir la mortalidad materna y a prevenir los riesgos para la salud, pues permite espaciar los embarazos y evita aquellos no deseados.

Por otro lado, contribuye a una mejor educación para que niñas y mujeres conozcan mejor su cuerpo y sus derechos. Gracias a esto pueden tomar decisiones bien fundamentadas con relación a su salud sexual y reproductiva, como por ejemplo, decidir de manera responsable el número de hijos que quieren tener.

Todo esto tiene consecuencias a largo plazo como una mayor participación en la vida pública, mayor oportunidad de tener un empleo remunerado y en caso tengan hijos, a ser más conscientes de brindarles el tiempo y educación que merecen.

Sin duda aún nos queda mucho por trabajar en cuanto a educación y salud con el fin de que las niñas y mujeres puedan tener vidas saludables con el pleno conocimiento de su cuerpo y de sus derechos sexuales y reproductivos. Con una adecuada educación sexual integral podremos reducir la brecha de género.

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