¿De qué tipo de leche está hecho el queso más caro del mundo?

Uno de los productos más demandados de los últimos años es el queso que se produce en la reserva natural de Zasavica, ubicada a 90 kilómetros al noreste de Belgrado, Serbia.

Reserva. Este territorio fue declarado reserva natural por el ex primer ministro Slobodan Simic en el año 1997. Años más tarde, acudió a una feria agrícola en el pueblo de Ruma donde maltrataban a unos burros de la zona de los Balcanes, entonces los rescató y trasladó hacia Zasavica.

Queso más caro. De estos burros es que se produce el queso más caro del mundo. La leche de estos burros se produce en pocas cantidades, aproximadamente 300 mililitros al día que son ricas en vitaminas y minerales, según informó el portal web de la BBC.

Precio. Una pequeña porción del tamaño de un pastel de este queso llega a costar 55 dólares. En la antigüedad se creyó que consumir leche de burro retrasaba el envejecimiento y mejoraba el sistema inmunológico.

Propiedades. "Si tomas nuestra leche eres capaz de acostarte incluso con tu propia esposa", ha ironizado en algún momento el ex primer ministro de Serbia sobre las propiedades de la leche que, asegura, también contribuye a la virilidad.

Experto. El experto en productos lácteos, Stevan Marinkovic, dijo que no se había producido antes queso con burros, hubo entonces un proceso experimental para conseguir el producto. 

Productos. La proteína para que se pueda producir queso llamada caseína no es una propiedad que posea la leche de burro, por eso, este experto decidió mezclar esta con leche de cabra. Así se puede producir el queso más caro del mundo. Marinkovic patentará su invento.

Producción. Sin embargo, se tuvo que suspender su producción porque el producto no es pasteurizado. Mientras se soluciona este inconveniente, los productores locales elaboran quesos artesanalmente usando leche pasteurizada.

Sabor. El sabor de este queso es suave y tiene un toque dulce. Esto gracias a la combinación del sabor amargo y agrio de la leche de cabra con la textura consistente y sabor almidonado de la leche de burro.

Subsidios. También puede servir como materia prima para fabricar jabones gracias al alto contenido de ácidos grasos y vitamina A. Incluso hay subsidios internacionales para que la producción se convierta en autosostenible; el proyecto continúa.