El Gobierno de Trump señala que los países deben hacer su parte para prevenir y disuadir el tránsito de extranjeros que buscan ingresar ilegalmente en Estados Unidos.
El Gobierno de Donald Trump anunció este miércoles que vetará las visas a los funcionarios de otros países que faciliten los flujos migratorios ilegales hacia Estados Unidos.
A través de un comunicado, el secretario de Estado, Marco Rubio, anunció la nueva política y precisó que las restricciones de visas se aplicarán a los funcionarios de gobiernos extranjeros, incluidos los de inmigración y aduanas, y las autoridades aeroportuarias y portuarias, y otras personas que se consideren “responsables” de facilitar deliberadamente la “inmigración ilegal”.
Rubio también señaló que se considerará a aquellos que no apliquen las leyes de inmigración o implementen políticas y prácticas que faciliten deliberadamente el tránsito de extranjeros que intenten migrar ilegalmente.
“Proteger las fronteras de nuestra nación es de vital importancia para que Estados Unidos sea un país más seguro, más fuerte y próspero. Los países a lo largo de las rutas migratorias deben hacer su parte para prevenir y disuadir el tránsito de extranjeros que buscan ingresar ilegalmente en Estados Unidos”, se lee en el comunicado.
La Administración de Donald Trump estableció que estas medidas estarán vigentes hasta que dichos funcionarios asuman la responsabilidad de garantizar que se establezcan políticas y se apliquen las leyes vigentes para “prevenir el tránsito de esas personas”.
“Estados Unidos no dará marcha atrás en lo que se refiere a la defensa de nuestros intereses de seguridad nacional”, alegó Marco Rubio.
La disposición del secretario de Estados complementa la actual política “3C, diseñada por la entonces gestión de Joe Biden, la cual restringe la visas a los responsables de aerolíneas y otras empresas privadas de transporte que faciliten el movimiento de migrantes indocumentados que buscan llegar a territorio estadounidense.
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