El modelo es un sexy vestido de chifón, en color crudo, de la diseñadora Disaya. Tiene un precio estimado de entre 16.000 y 32.000 dólares .
El vestido sexy de chifón que llevó Amy Winehouse para la portada de su exitoso álbum "Back to black" se subastará el 29 de noviembre en Londres a fin de recaudar fondos para la fundación de ayuda a la juventud que lleva su nombre, informaron hoy los organizadores.
La casa de subastas Kerry Taylor indicó que el modelo, firmado por la diseñadora Disaya, radicada en Tailandia, tiene un precio estimado de entre 10.000 y 20.000 libras (entre 11.600 y 23.300 euros o entre 16.000 y 32.000 dólares).
Se trata de un vestido corto de tirantes finos en color crudo y estampado con líneas construidas a base de pequeños topos, con un adorno de encaje en el escote.
En la portada de "Back to black", que salió en 2006 y del que se han vendido más de 3,2 millones de copias, Winehouse llevaba el diseño adornado con un moderno cinturón rojo.
Según Kerry Taylor, que subastará el vestido en la sala La Gallería de Londres, fue la propia diseñadora, que se licenció en la escuela londinense de Saint Martin"s, la que después de la muerte de la cantante en julio pasado ofreció el modelo para que fuera subastado y los fondos recaudados se destinaran a la fundación Amy Winehouse.
De acuerdo con la casa de subastas, Louise Winwood, la estilista de la artista, recurrió a Disaya cuando preparaba la portada de su segundo disco con el sello Universal Island Records.
En aquel momento, explica, Winehouse no era aún tan conocida y otros diseñadores famosos habían rechazado prestar sus diseños para la fotografía de portada del álbum, que incluye grandes éxitos como "Rehab" y "You know I"m no good".
Tras la sesión en casa del fotógrafo Mischa Richter, el equipo de Winehouse devolvió el vestido a su creadora, quien ahora ha decidido sacarlo de su almacén para que sea subastado.
El dinero que se recaude irá a parar a la fundación Amy Winehouse de ayuda a proyectos juveniles, puesta en marcha por los padres de la artista, Mitch y Janis, tras la muerte de su hija en Londres tras un larga batalla con el alcohol y las drogas.
EFE
Comparte esta noticia