Vimos 'Esta es la U' y relatamos cómo vivieron los hinchas que acudieron a las salas de cine. En esta nota se narran algunos 'spoilers'.
Ser hincha de Universitario de Deportes significa llenar estadios y salas de cine. Prueba de ello es que este año el conjunto ‘crema’ llevó a más de 680 mil fieles seguidores al Monumental, liderando la tabla de asistencia. Otra demostración es el reciente estreno del documental ‘Esta es la U’, que convocó al aficionado ‘merengue’ con ilusión para ver a su equipo en la pantalla grande. Se anunciaron funciones en diversos cines de la capital y los hinchas no tardaron en agotar las entradas, pues se tuvieron que habilitar nuevos horarios.
Quien escribe estas líneas consiguió una entrada para la función del Cinestar de Benavides, programada para las 7:45 p.m. Al llegar al cine, los exteriores se habían pintado de crema y guinda, pues la marea humana no dudó en acudir uniformada para armar la fiesta previa a la proyección. Padres con hijos cargados en brazos, grupos de jóvenes treintañeros, adolescentes enamorados y mujeres hinchas formaron una extensa fila que casi daba la vuelta a la manzana. Todos entusiasmados por lo que verían las próximas dos horas.
El reloj marcaba las 8 en punto y los hinchas comenzaron a ingresar cual procesión a la sala. Fue recién a las 8:15 p.m., con el 90% de asistentes ya sentados en sus butacas, que se pudo divisar la frase inicial con la que arranca el documental.
► "Esta es la U": ¿dónde ver la película de Universitario por su centenario?
Seguido, se escuchaban frases de jugadores e hinchas que iban narrando lo que vendría: ese cántico inicial que acompaña cada partido. Un ritual que ha pasado de generación en generación y que representa lo que se vive antes de que Universitario de Deportes salga al campo de juego: ‘Vamos, merengues, que tenemos que ganar’…
El público se emociona, se siente identificado y pareciera que está dentro de la película. Muchos de ellos se atreven a cantar y aplaudir en simultáneo a la proyección.
Ser de la ‘U’ es ser parte de la historia
El documental ‘Esta es la U’ transita entre la nostalgia, el drama y el amor a una camiseta llena de historia. ¿Cómo se puede resumir 100 años de grandeza futbolística? El director Daniel Farfán comentó a RPP que la proyección acompaña a Universitario en su lucha por alcanzar el bicampeonato en el año de su Centenario, mientras se explora los puntos más resaltantes de su rica historia: la ilusión de ganar una Copa Libertadores, la crisis por el mal manejo del club, la vida y pasión del ídolo ‘Lolo’ Fernández, las anécdotas de los futbolistas más veteranos y las historias de lo que significa ser hincha ‘crema’.
‘Esta es la U’ es una pieza cinematográfica que incluye entrevistas, videos inéditos, material de archivo con las jugadas magistrales que quedarán grabadas en la memoria colectiva, la risa y picardía de jugadores como el ‘Cuto’ Guadalupe (quien inevitablemente hace reír al público en cada aparición durante la película, hasta en el penal que patea en 1998), y el registro de la icónica frase de Ángel Cappa: ‘Contra todo y contra todos…’. Eso y más.
Universitario también es su gente
La historia de la ‘U’ no puede contarse sin la perspectiva del hincha. "Ellos son los que han resistido muchas cosas en estos últimos 20 años, han llevado su pasión, su entrega al activismo político y han demostrado su pasión por la 'U'. Han sido años duros desde lo deportivo e institucional", agregó Daniel Farfán.
El documental ‘Esta es la U’ es una invitación a enamorarse una vez más del club que ha logrado lo que ningún otro ha podido: resurgir cual ave fénix y convertirse en bicampeón nacional el año de su centenario. Al finalizar la película, los asistentes sacan sus celulares y cantan, como si las butacas fuesen las tribunas norte, oriente, sur y occidente: ‘Por una vez más, merengue solo sirve ganar, cada partido es una final. Vamos, Universitario, pongan huevos que ganamos’…
Vale abrazar al compañero, derramar algunas lágrimas y salir en procesión a seguir cantando, pues la proyección podrá terminar, las salas podrán cerrar sus puertas, pero un amor como el que se tiene a Universitario nunca se podrá apagar.
Comparte esta noticia